Manta natural, diseño trama
Manta verde agua, diseño diagonales caladas
Manta celeste, diseño ladrillos
El Puente Colgante de Santa Fe es un símbolo de la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz, Argentina. Este Puente Colgante posee una larga historia que incluye un derrumbe casi total y su posterior restauración luego de muchos años.
Concebido originalmente para trasladar agua proveniente desde Colastiné, el puente colgante actualmente sirve como atractivo turístico, y para comunicar la ciudad con la Costanera Este, la Ciudad Universitaria, el barrio El Pozo, etc.
El puente colgante fue el único paso vehicular hacia el Este hasta la construcción del viaducto Oroño, comenzado en 1968 y concluido en 1971. Ambos puentes se encuentran apenas separados entre sí.
Contexto histórico y puentes anteriores
A principios del siglo 20, era indispensable poseer un servicio de agua potable en una ciudad que ya contaba con más de 40 mil personas.
En 1904-1905 se construyó el puente Carretero de madera dura con el propósito de habilitar un paso vehicular hacia Rincón/Colastiné y servir también para traer agua en cañerías desde allí. Pero jamás pudo ser usado pues la crecida de 1905 lo arrastró junto con el cruce del ferrocarril, ubicado 150 metros aguas abajo.
Por esto se creó en 1909 un puente acueducto de estructura mixta que sólo soportaba el peso de las cañerías de agua, pero no servía como paso hacia Rincón. Sólo duró 3 años, el río y los camalotes tiraron este nuevo puente. Luego se proyectó en 1915 un puente carretero de estructura metálica, pensado para resistir crecientes y camalotes, pero no pudo concretarse, pues los precios del metal subieron mucho durante la primera guerra mundial.
Para 1914, Santa Fe contaba con 70 mil habitantes y el servicio de agua potable necesitaba de un mayor caudal de agua para abastecer a los santafesinos.
Se presentó un nuevo proyecto en 1916 para la construcción de un puente carretero de hormigón armado. Se llamó a licitación el 12 de abril de 1917, pero las ofertas presentaban costos demasiado elevados.
En ese momento sólo había una cañería de 12 kilómetros de sólo 40 cm. de diámetro que tomaba agua desde Colastiné y cruzaba la laguna Setúbal por un viejo puente que cayó en 1919.
Se suministró una tubería flotante por parte de la Dirección General de Navegación y Puertos, lográndose unir nuevamente Colastiné con la planta potabilizadora en Santa Fe.
Sobre este acueducto volvió a construirse una nueva obra que nuevamente volvió a ser arrasada en 1921.
En 1920 comenzó a construirse un puente-acueducto de cemento armado, pero sólo pudo terminarse un solo pilotaje, pues las aguas no descendían.
Había una presión ciudadana importante para que se garantizara agua potable a todos los santafesinos. Además, la laguna impedía la expansión de la ciudad hacía el lado este, pues sólo podría cruzarse en embarcaciones o ferrocarril.
Las autoridades nacionales se decidieron a la construcción del puente colgante en 1921. Puente que debería ser mejor pensado que sus predecesores. Fue nombrado como el santafesino Marcial Rafael Candioti, presidente de Obras Sanitarias de la Nación en aquel momento. Obras Sanitarias de la Nación se encargó de dibujar los planos que sirvieron para la licitación del puente en la década del 20. Estos mismos planos fueron utilizados en la reciente reconstrucción del puente colgante.
Teniendo en cuenta los errores cometidos anteriormente, se limitaron a un puente con sólo dos pilares, más pilares habrían formado una barrera de acumulación de camalotes, lo cuál derrumbó las obras anteriores.
El 19 de junio de 1922 se licitó internacionalmente la provisión y montaje de la estructura metálica. Hubo propuestas de Francia, Bélgica, EE.UU., e Inglaterra. La empresa ganadora de la licitación fue la Casa Wattinne Bossut et fils, en nombre de la “Societé des Chantiers et Ateliers de la Gironde” de París. Poseía un reconocidísimo plantel de ingenieros que habían construido la mayoría de los puentes de Europa de esa época. Esta adjudicación se produjo el 10 de octubre de 1922 por un monto de $531.277. Se propuso el sistema Gisclard para las vigas de suspensión. La estructura metálica fue construida en Francia. Los pilares fueron hechos por Obras Sanitarias de la Nación.
Construcción del puente colgante original
El pilar del lado oeste ya se había construido en 1920, pensado para utilizarlo en un puente de hormigón. Para hincar los pilotes del pilar del lado este, se utilizó una ataguía, un recinto formado por una doble pared de tablestacas metálicas. Los dos pilares hechos por Obras Sanitarias de la Nación se terminaron en 1924. La Nación también se encargó de los dos estribos de hormigón armado con sus respectivas plateas de fundación, como también de las galerías de anclaje desde donde se tensa el cableado a ambos lados.
Las piezas para la construcción de las torres de suspensión o antenas metálicas de 33 metros llegaron desde Francia.
Colapso de 1983
El 28 de septiembre de 1983 fue un penoso día para Santa Fe. Para sorpresa de todos y bajo la atenta mirada de vecinos y periodistas, parte del puente colgante caía luego de una terrible inundación que había durado varios meses. Fotos y videos de entonces muestran una lenta caída.
La antena Este colapsó a las 16:35 horas. El diario santafesino El Litoral publicó ese día, retrasando la salida por tal acontecimiento, “Un adiós que quiere ser hasta luego”. Un hasta luego que significó casi 20 años.
Parte del puente quedó hundido en la laguna Setúbal y se recuperó en 1984.
Reconstrucción
La reconstrucción del puente era muy deseada por la mayoría de los santafesinos, ya que éste siempre había sido un orgullo para la ciudad.
Los trabajos comenzaron en abril de 2000 por parte de la empresa CCI Construcciones y se procuró respetar en gran parte la estructura original de la década del 20. Esto es claro, por ejemplo, en la inclusión de una tubería que no cumple ninguna función, pero que sí lo hacía en su primera construcción.
El puente, una vez reconstruído, preservó los elementos originales, integrándolos a los nuevos y contrastándolos, sin romper la unidad visual de la obra.
Este nuevo puente conserva la antena Oeste original, armada en el año 1924. La nueva antena fue construída en la ciudad de Esperanza, por la empresa Ferma. Llegó a Santa Fe a fines de abril de 2001 y fue montada con una gigantesca grúa el 6 de julio de ese año. Se diferencia de la antigua antena en que carece de remaches.