Alimentar
a los bebés prematuros con leche materna, en especial durante el primer mes de
vida, parece estimular considerablemente más el crecimiento del cerebro,
en comparación con los bebés pretérmino a los que se ha dado poca o ninguna
leche materna, según un estudio presentado en la reunión anual de la Pediatric
Academic Societies, en Baltimore.
Alrededor
del 10 por ciento de los niños en todo el mundo nacen prematuramente y cerca
del 15 por ciento pesan menos de 1.500 gramos y están clasificados como de muy
bajo peso al nacer.
El
estudio, llevado a cabo en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN)
del Hospital de Niños de St. Louis, evidencia que los bebés prematuros alimentados
al menos en un 50% con leche materna tenían más tejido cerebral y mayor
superficie en la corteza del cerebro de lo esperado por su fecha de
nacimiento que otros prematuros que consumieron significativamente menos leche
materna.
“El
cerebro de los bebés nacidos antes de término por lo general no está
completamente desarrollado”, explica Cynthia Rogers, del Hospital de Niños de
St. Louis. ”La leche materna se ha demostrado que es útil en otras áreas
de desarrollo, así que quisimos ver el efecto que podría tener en el cerebro.
Con imágenes de resonancia magnética, vimos que los bebés alimentados
con más leche materna tenían volúmenes cerebrales más grandes. Esto es
importante porque varios estudios han demostrado una correlación entre
el volumen del cerebro, el cociente intelectual (CI) y el desarrollo cognitivo de
los niños”.