- El color de la leche varía
según el momento del desarrollo de la lactancia. El calostro es amarillento y
algo traslúcido. Pero puede tomar otros colores dependiendo de lo que haya
ingerido la madre o de algunas circunstancias especiales. La leche de transición
mantiene algo del amarillo del calostro, y la leche madura tiende a ser blanca
la mayor parte del tiempo.
El color de la leche varía con
el momento de la toma. La leche inicial o primera leche es blancuzca y de
aspecto “poco cremoso”, la segunda leche o leche final es más densa (tiene más
grasa), puede tener un color similar al de la crema comercial de leche de vaca.
- El color de la leche cambia
con algunas circunstancias que acompañan la lactancia. Al principio puede
producirse lo que se conoce como “síndrome de caños oxidados” que se produce
por el pasaje de algunos glóbulos rojos a la leche durante el proceso de
proliferación de conductos lactíferos que se produce durante el embarazo. La
leche toma un tinte rojizo o verdoso. Es totalmente inofensivo para el bebé.
Algunas mamás al usar un sacaleches mecánico o eléctrico observan que aparece
sangre en la leche. Esto puede deberse a una lesión interna por un exceso de
fuerza en el proceso de extracción, por lesiones en el pezón que pierden su
costra y sangran (hay mamás que recurren al sacaleches para mantener la
producción mientras se recuperan de lesiones severas en el pezón) o por la
presencia de un papiloma intraductal, una condición benigna que requiere
atención médica.
- El color de la leche se ve
influido por lo que la mamá ingiere. Algunas vitaminas o suplementos, bebidas
deportivas, colorantes de alimentos, etc, pueden teñir la leche. De nuevo, esto
es completamente inofensivo para el bebé.
Este documento tiene fines
informativos y no reemplaza la atención médica.
Preparado por: V. Garea IBCLC
©GALM Bariloche. Permitida la
reproducción sin modificaciones y citando la fuente.
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